Niepoort

Con una historia que se remonta a 1842, Nieeport representa el ejemplo clásico de empresa familiar que, gracias al buen hacer, puede presumir de haber llegado con éxito a su quinta generación. En virtud de la transmisión continua de habilidades y experiencias de una generación a la siguiente, la atención que aún se presta a las fases de producción habla de un amor total por este trabajo y, sobre todo, por el vino de Oporto. La propiedad de la empresa se extiende sobre un área muy grande: unos ochenta kilómetros al este de Oporto, casi llega a la frontera con España. Esta franja de tierra disfruta de un terruño excepcional, que se beneficia de los suelos rocosos. Particularmente enriquecidos gracias a la presencia de fósforo, tienen una formación vertical. De ahí que las raíces de las plantas puedan alcanzar casi los treinta metros de profundidad, aspecto que resulta muy importante para disponer de todos los elementos necesarios para nutrirlas incluso durante los calurosos veranos. La gama de etiquetas que produce esta bodega alcanza estándares realmente altos, capaces de ganarse el respeto de todos los demás productores. Un verdadero ejemplo a tomar como modelo de referencia, que además tiene la ventaja de poder ofrecer una gama muy amplia de Ports, realizados en diferentes estilos. Ya sea Oporto Tawny o Oporto Vintage, Oporto Rubí o Oporto Blanco, en la producción de la bodega ciertamente hay una botella capaz de satisfacer cualquier paladar. La amplia variedad se logra sin ceder nunca a compromisos: la especialización no fue la elección que caracterizó la filosofía de producción, sino que el objetivo es alcanzar el más alto nivel de calidad en toda la gama. Estos vinos representan productos realmente excelentes, imprescindibles para los amantes de Oporto y más.