Dom Perignon

Dom Pérignon, el champán por excelencia, recuerda inmediatamente la elegancia francesa y el lujo de las burbujas nacaradas que acarician el paladar con vivacidad. Su historia comienza hace muchos siglos cuando, a finales del 1600, el monje benedictino Pierre Pérignon descubre, durante uno de sus viajes, la existencia de una técnica que permitía transformar el vino en una bebida gaseosa irresistible. El monje, que siempre ha sido un apasionado de los vinos y los viñedos, utilizó su descubrimiento para crear, en el secreto de la sugerente abadía de Saint-Pierre d'Hautvillers, el primer vino de champán de la historia. Unos siglos más tarde, en la legendaria historia del más famoso de los champagnes, aparece otro nombre altisonante en el panorama vinícola francés: se trata de Robert Jean de Vogue, entonces director de la renombrada Maison Moët & Chandon. Su gran intuición le llevó a utilizar las mejores reservas de espumoso de la empresa para crear una fina línea de botellas con las que recoger el legado del monje benedictino. Así nació, en 1936, una cuvée extralujosa, que consagró a Dom Pérignon como el champán más prestigioso del mundo. Desde entonces, el nombre ha sido una marca separada de la reconocida bodega Moët & Chandon. Producido exclusivamente en añadas que ofrecen uvas de excelente calidad, el champagne utiliza uvas cultivadas en viñedos Grand Cru. El cultivo de la uva y la elaboración del champán tienen lugar en el corazón de la región de Champaña, rica en excelentes terroirs para la producción de vinos de gran calibre, e involucran viñedos distribuidos en muchos municipios diferentes, incluidos Hautvillers, Ay, Cramant y Verzenay. Las uvas utilizadas son Chardonnay y Pinot Noir, de las cuales solo se seleccionan las mejores frutas. Para ver la luz, una botella de Dom Perignon necesita 8 años de producción, durante los cuales se sigue de manera artesanal el antiguo método "champenoise" con refermentación. El resultado de tanto trabajo está representado por champagnes vintage exclusivos, que se ofrecen hoy en el mercado tanto en la versión clásica "blanca", como en las preciosas variantes rosadas y en las extraordinarias colecciones Vintage.