friulano

Detrás de este vino extraordinario y de la uva que lo compone (Tocai) hay una historia de paradoja burocrática ordinaria: en esencia, desde 2008 la Comunidad Europea obliga a los productores friulanos a nombrar este vino precisamente como Friulano , y ya no como Tocai (como por tradición centenaria) ya que Hungría ganó la disputa legal en la que afirmó que el consumidor podría haber confundido nuestro vino blanco seco Tocai con su vino dulce de pasas llamado Tokaji, producido con uvas Furmint (¡de probado origen friulano!). En cualquier caso, Friulano es un vino de color amarillo pajizo con reflejos verdosos. El aroma es fino y se caracteriza por notas típicas de flor de almendro y almendra amarga. En boca es suave y de excelente estructura, con un buen equilibrio entre frescor, sabor y componente alcohólico y con una agradable persistencia almendrada. Un auténtico lujo para los abonados con la gastronomía local.